Peleo
por ser dueño y regidor
de las palabras, de los matemáticos
futuros.
Me creo inteligente,
capaz de dominar
las sintácticas tempestades,
las químicas fórmulas
donde se originan los sentimientos.
Sin embargo,
en pleno éxtasis de perfección,
de exaltación del ego,
sintiéndome vencedor
de la gravedad humana
que empuja al desequilibrio,
basta
un rebelde instante,
un íntimo descuido,
para que todo ceda,
para que claudique el imperio
de mi inalterable gramática.
Una milésima,
que apenas es tiempo
ni da lugar a memoria alguna,
sirve
para que la forzada y artificial
retórica de mi discurso
sucumba ante tu mirada
vestida
de verde selva inexplorada.
Los cálculos infinitesimales,
utensilios para el orden
y la clasificación,
se disuelven,
porque la espontaneidad
de tu gesto
es arma de despiste
ante las certezas
y las seguridades.
Alzo mi bandera blanca
ante la tímida calidez de tu ingenio.
Y decido hablarte,
decido confesarte
la verdad de las intenciones,
la clave oculta en el verso.
Pero cuando miro a través del cristal
empujado por la ebriedad,
por la desnudez de
mis miserias,
atónito descubro
que sólo eres
un reflejo de alguien extraño
que cruzó detrás de mí,
que fui yo
quien quiso verte.
a mi lado.
JcS
Así es. Basta el vuelo de una mosca impertinente, para que podamos ser consciente de nuestra extrema fragilidad...Un poema precioso. Un abrazo.
ResponderEliminarEspejismos...ilusionadores del sediento.
ResponderEliminarUn beso, el poema es bellisimo, frustrante pero bellisimo
Delirios de embriaguez. Me ha gustado mucho, sigue tintineando en mi mente, así que lo leeré de nuevo.
ResponderEliminarUn beso.
hermosa entrada realmente un placer leerte. abrazo!
ResponderEliminartus versos me dejan el regusto de una resaca serena. Hermoso e intenso poema, Julio
ResponderEliminarabrazos
se me hielan las manos al leer tu poema.
ResponderEliminarhay un estúpido humano que escribe en mi teclado.
no me apetece ir al cuarto de baño.
suelo resoplar al terminar de leerte.
todo esto que me pasa es bueno.
un fuerte abrazo Julio.
Jo que bonito,me ha hecho abrir las oxidadas puertas de mis lagrimales y regar mis mejillas a modo de fertilizante de pasados sentimientos. Muchas gracias, un saludo
ResponderEliminarQué sería de nosotros sin esa dramática iluminación de vulnerabilidad existencial, que nos hace seguir vivos en el reflejo de nuestras ensoñaciones...
ResponderEliminarTe estás haciendo inmenso, poema a poema.
Abrazos desde el otro lado del espejo
Despertar del mundo de las ilusiones.
ResponderEliminarCómo te adoro Julio*
el desaparecer de las ciencias exactas ante una mirada!
ResponderEliminarese final me dejó pensando, malditas alucinaciones ópticas!
hermoso texto!
un abrazo
:)
me-encanta:
ResponderEliminar"
Peleo
por ser dueño y regidor
de las palabras, de los matemáticos
futuros.
Me creo inteligente,
capaz de dominar
las sintácticas tempestades,
las químicas fórmulas
donde se originan los sentimientos."